Escuchaba una conversa de mayores -Fui invitado a opinar y preferí callar- (para ser mas claro y menos tosco, de esas de padres y madres, gente con hijos) en este caso quejándose por una chica rebelde que tenia a su madre en un debate en el asegurarla en casa o en liberarse de la tensión y permitir el libertinaje para su prole. La molestia continuaba en la búsqueda de una ayuda celestial o de interseción y las típicas frases de "no se que hacer con esta niña" y "que he hecho para merecerme esto". En eso pensé inmediato en el llamado cliché o ideal de adolescente= inmaduro, rebelde, grosero y en contra de "las buenas costumbres" de las que tanto hablan los seres de antaño.
Es triste que una chica de 15 años amanezca en la calle por estar en fiestas y llegue a casa tomada y en un estado indeseable, que se pase horas de rumba y fiesta y su familia en la incertidumbre total. Quizás he sido un adolescente aburrido y nunca di esa lidia a mis padres sin embargo a veces pienso, que clase de vida hubiese tenido o que experiencia o aprendizaje tuviese a raíz de vivir así sea una vez algo así, luego regreso a mi mundo y recuerdo que eso no esta hecho para mi, ya que ni se bailar, ni se si me gusta y mejor ni intento salir a sitios que ni me gustan, pero esa no es la idea de este escrito.
Algunos dicen que es bueno darle libertad a los jóvenes y permitir de vez en vez cierta libertad, otros alegan que es mejor sujetarles y cohibirles de cualquier placer terreno y llevarles a la luz, por el camino del bien, la decencia y los buenos deseos de la sociedad, claro, ese tipo de sociedad mas basada en los principios, valores y mas saberes.
Se dice y refuta que muchos padres se hacen "santos" para sus hijos, para que estos nos repitan sus experiencias en algunas discotecas, fiestas y mas lugares de este tipo. otros defienden la postura de que una salida al año no hace daño, tampoco dos, ni tres, cuando esta se hace excesiva y de cada fin de semana, se vuelve o algo "cultural" o algo "indecente". que creer? que decir? que pensar?
La charla continua y el obligado tema del novio llego: esta niña ha de tener novio, ella me dice que no, pero esas salidas hasta tan tarde ya me hacen creer que tiene su "guardado" - decía la madre angustiada. -que si, que eso, debe ser, hay que estar pendientes, ya sabes como son los muchachos de ahora, replicaba la comadre.
Se llega a los consejos y saberes de la abuela y las costumbres y/o castigos de épocas inmemoriales, otro acude a la modernidad para decir que no hay nada que con un buen psicólogo no se pueda mejorar.
A fin de cuentas, cada conversación de este tipo cierra en el: esta mas atenta, se mas cuidadosa, dile que en tu casa mandas tu. "mientras estés bajo este techo, se hace lo que yo digo".
La reacción mas notable de la adolescente ha de ser el protestar, enfadarse, quizás callarse y con miradas fulminantes sin disimulo o expresar su ira con los mas sagaces gritos.
He aquí una discusión que por mas libros de autoayuda y para padres que se haga no se podrá solucionar, en el momento que cada caso se vuelve mas especifico, o al menos, eso dicen los involucrados en el problema de momento.
Que pensar? que decir? que opinar? y si la reacción adolescente ademas de ser caprichosa y retadora, sea influenciada por mas problemas de infancia, disputas, inconvenientes en cuanto a amor, aprecio y esas cosas que dicen los expertos en una sesión.
Ver para creer si el adolescente reacciona con técnicas tan generalizadas, diría alguien.