¿QUÉ ES EL LIBERALISMO? UNA DEFINICIÓN HISTÓRICA

El Liberalismo en su sentido más amplio es definido por gran cantidad de acontecimientos, incidencias y períodos históricos.  Entendemos además que es un concepto problemático por la cantidad de tópicos que tiene. Friedrich August Hayek (autor central del cual comparto su ideal) argumenta que: El término “liberalismo” se usa hoy con una variedad de significados que poco tienen en común aparte de designar una apertura hacia ideas nuevas, entre ellas algunas directamente contrarias a las que, en el siglo XIX y principios del XX, se designaban con esta palabra. Hayek resalta al Liberalismo como una fuerza intelectual notable que se dio en Europa y que trasciende al área política por sus mecanismos y formas de llegar a la gente. 



Inicialmente el Liberalismo es para Hayek una libertad individual en la que un «gobierno sometido a la ley» asegura a sus ciudadanos. Esta corriente que creció con gran rapidez en la hoy Gran Bretaña da el movimiento a favor de la libertad en los países del continente europeo, en los que el absolutismo había destruido en gran parte las libertades medievales que, por el contrario, se habían conservado ampliamente en Inglaterra. Hayek une el concepto a un legado meramente filosófico y le adjudica un valor multidisciplinar, en cuanto es un término que puede claramente ser abordado desde diversas ópticas y ciencias.  Su mejor formulación sigue siendo probablemente la de Baruch Spinoza, según el cual: «un hombre libre es aquel que vive sólo según los dictados de la razón».



La libertad de pensamiento, de palabra y de prensa es inicialmente condicionante del uso del concepto. La mayoría de los partidarios de este movimiento en Europa profesaba algún tipo de creencia en la libertad de acción del individuo y en alguna especie de igualdad de todos los hombres. “Libertad” e “Igualdad” solían ir de la mano, por lo menos en el discurso como puntos centrales de lo que deseaba llamarse Liberalismo.


Adam Smith, uno de los primeros autores en usar el término lo hace en el siglo XVIII, resumiendo el concepto como un adjetivo en: «proyecto liberal de igualdad, de libertad y de justicia».  Esta denominación ahonda más en el sentido político del término. Sin embargo la trascendencia del concepto se da sólo a principios del siglo XIX, cuando fue empleado por el partido español de los liberales y, poco después, cuando fue adoptado como denominación de partido en Francia. En Inglaterra este uso del término liberalismo apareció sólo después de la unificación de los whigs (antiguo nombre y  predecesor del Partido Liberal Británico) y los radicales en un único partido, que a partir de los años cuarenta fue conocido como Partido Liberal. 



Rodrigo Llano Isaza, historiador liberal da un concepto a su partido entendido desde el término “liberal”, en cuyo caso nos dice que: Desde los tiempos de Roma se utilizaba la voz “Liberalis”, que tenía relación con los oficios de la gente libre, lo que después se denominó “Artes Liberales”, para distinguirlos de los oficios que desempeñaban los esclavos que pasaron a llamarse “serviles”. En resumidas cuentas y obviando los romanticismos del término, podemos entender entonces al Partido liberal como la denominación política de raíz liberal amparada en las libertades civiles y derechos individuales que se organiza en Colombia desde 1848. Con palabras de Isaza cabe anotar que se considera a John Locke, nacido en Wrington, Somerset, Inglaterra, el 29 de agosto de 1632 y muerto en Oates, Inglaterra, el 27 de octubre de 1704, como el padre del Liberalismo; es bien importante que el Liberalismo colombiano rescate la figura de Locke como su más importante antecedente ideológico.



Sabemos hoy que la palabra “Liberal” llegó a tomar con el paso del tiempo la acepción de generoso o desinteresado y como tal apareció en el “Tesoro de la Lengua Castellana” de 1611 e incluso, en una carta del Precursor de la independencia americana don Francisco de Miranda, expresó acerca de alguien que recomendaba: “es persona de mérito, confiable, puede tenérsele como amigo, es un Liberal”. El concepto liberal nació en la Asamblea francesa el 4 de agosto de 1789 con la publicación de los “derechos del hombre y el ciudadano”. Pero fue en el Diccionario Crítico Burlesco publicado por Bartolomé José Gallardo en 1812, donde se definieron las ideas Liberales como aquellas que propenden por el amor y la posesión de la libertad, además de extender su benéfica influencia a toda la sociedad. Y, políticamente, fue en las Cortes de Cádiz de 1810 a 1813, donde el término Liberal se utilizó para denominar a quienes abogaban por la libertad y a sus contrarios los denominaron serviles o godos. Esta usanza europea de términos llegó a Colombia donde también se empieza a utilizar a “godo” como sinónimo de conservador.